Sinopsis
En vísperas de una
tormenta de nieve, un viernes tras la barra de galeón pirata de un bar
escondido, un barman recién llegado del Loira espera la llegada de Kate, la
chica del extraordinario cabello flotante y las larguísimas bufandas.
Kate vive en un edificio antiguo como su propia tristeza y hace tanto tiempo que se ha dejado llevar por la rutina que ya no recuerda el sentido de los pequeños detalles, la aventura escondida en las sorprendentes pistas cotidianas. Un extraño jardín y una emisora de radio colgada del cielo en una buhardilla de madera constituyen su refugio para ese otoño. Y, sin embargo, aunque en la pequeña ciudad de Coleridge todos ignoren las advertencias de un excéntrico meteorólogo, el tiempo está a punto de cambiar el noviembre de Kate de la mano de un hombre bueno con planes de venganza, un sábado de tortitas y la risa de los argonautas.
La
autora
Mónica Gutiérrez nació y
vive en Barcelona. Es licenciada en Periodismo por la Universitat Autònoma de
Barcelona (UAB) y en Historia por la Universitat de Barcelona (UB).
Apasionada lectora, escribe novela, relatos y poesía. En la actualidad compagina la escritura de ficción con la docencia y suele charlar de literatura con buenos amigos en su blog Serendipia
Debutó en el mundo de la publicación con Cuéntame una noctalia, y las buenas críticas de Un hotel en ninguna parte, su segunda novela, han mantenido a la autora durante más de un año en la lista de los más vendidos de Amazon.
Impresiones
Mi género favorito suele
ser el thriller, el misterio, lo policiaco. También me gustan las novelas históricas. Pero de vez
en cuanto me gusta leer otras cosas, algo más romántico pero sin llegar a la
cursilería. Y así descubro a veces algunos libros que merecen mucho la pena. Y
este libro es uno de ellos.
Es una historia que te
atrapa desde el principio. Es bonito, agradable, positivo, conmovedor… Te hace
sentir bien. Te deja con una sonrisa en los labios cuando se acaba; y sí,
aunque ya sabes como acaba porque lo imaginas, te gusta su final.
La historia de Kate nos
puede pasar a cualquiera, a veces estás en un trabajo que no te llena, que
incluso odias, y sigues ahí porque es lo que tienes, pero como bien deja claro
el libro, a veces hay que arriesgarse y ver que las pequeñas cosas pueden hacernos felices y que podemos dar un cambio a
nuestra vida si dejamos de lamentarnos y nos enfrentamos a lo que no nos gusta;
no digo que dejemos el trabajo, que hoy por hoy no es tan fácil encontrar uno,
pero sí que podemos buscarnos un hobby para disfrutar de nuestro tiempo libre y
ver el mundo con optimismo. O incluso arriesgarnos y dar rienda suelta a nuestro emprendimiento y cambiar por
completo de trabajo intentando hacer lo que realmente queremos hacer.
Es lo que me ha gustado
del libro, que nos hace ver que las pequeñas cosas son buenas, que nos pueden
dar felicidad y que si estamos amargados y solo contemplamos lo malo, no
llegamos a ver lo bueno. Hay que abrir los ojos y disfrutar de lo que tenemos. Ser positivo.
Si os gusta esta clase de
libros no os lo podéis perder y si no es vuestro estilo, no pasa nada, puedes
darle o no una oportunidad y si se la das, seguro que no te defraudará. Mónica
tiene una prosa sencilla pero que engancha desde el principio, nos encontramos
con un pequeño misterio, una venganza, una gran tormenta que asola el pueblecito
donde vive la protagonista y les deja incomunicados, una buena historia de amor
y de amistad. Todos los ingredientes para pasar una buena tarde de lectura con
un té calentito en la mano en el sofá tapados con una manta (ya, ya, sé que
ahora es verano y esto no pega, bueno podemos cambiarlo por un té helado y una
tumbona en la playa/piscina).
Lo dicho, una novela
recomendable 100%.
4 estrellas en Goodreads.
Nos leemos,
Ayla